El señor Klingsor es un maestro. Ni muy alto ni muy bajo, ni muy gordo ni muy flaco. Pero con unos alegres ojos castaños. Y además, sabe hacer magia.
Cuando el pequeño Franz se incorpora a la escuela y nadie quiere sentarse con él porque es extranjero y no se puede hablar con él porque no entiende nada, el señor Klingsor lo tranquiliza diciendo: “No te preocupes, Franz. Ya se me ocurrirá algo” Y esa misma noche todos los niños de su clase sueñan que llegan a una escuela de un país desconocido cuya lengua ignoran y se encuentran con el rechazo de sus nuevos compañeros. A la mañana siguiente todos tratan a Franz con mucho cariño. En poco tiempo aprende el idioma y pasa a ser un compañero más.
Cuando a Steffi la pelirroja, a la que todos sonríen y dicen que es la niña más pecosa del mundo, se le mete en la cabeza que una niña con tantas pecas nunca encontrará marido, el señor Klingsor le da un jabón mágico que borra las pecas. Pero entonces ya nadie la encuentra tan divertida ni le dice las mismas cosas simpáticas de antes, y pide al maestro que vuelva a ayudarla. Entonces le da un lápiz mágico con el que vuelve a pintarse sus pecas.
Cuando el pequeño Jan, que es un niño malo, logra sacar de sus casillas al señor Effenberger y éste acude, desesperado, a su colega, el señor Klingsor murmura unas palabras que consiguen un mágico e inesperado efecto...en el señor Effenberger. Quien a partir de entonces se ríe de las travesuras de Jan sin que este vuelva nunca a hacerle perder la calma. Después de tres o cuatro semanas el pequeño Jan también ha cambiado y deja de hacer travesuras, porque portarse mal ha dejado de ser divertido.
El gran Otfried Preussler, autor de literatura infantil y creador de esta historia, nos recuerda que “todos los maestros, que quieran ser buenos maestros, tienen que saber hacer magia. Cada uno en su estilo, unos de una manera y otros de otra”.
¿Vale lo mismo para la educación, el trabajo social, la terapia? ¿Cómo cada cuál somos capaces de ver el lado bueno de las personas y darle la vuelta a las situaciones complicadas? ¿Cuál es nuestra magia?